Historia de
nuestro pueblo
(Las siguientes fotos se pueden ver más grandes si se pulsa
sobre ellas)
FÓSILES DE LA
ERA SECUNDARIA:
Se
pueden encontrar en "Las Cañadas", numerosos restos de
animales marinos de hace millones de años. La Era
Secundaria, también llamada Era Mesozoica o Mesozoico, fue
un periodo de la Tierra que se inició hace 225 millones
de años y finalizó hace unos 65. Se llama mesozoico
(palabra que también funciona como adjetivo, con el prefijo
"meso-", que significa "medio") porque se encuentra entre
dos eras, la Era Primaria y la Era Terciaria.
Durante estos 160 millones de años no se produjeron grandes
movimientos orogénicos.
En esta era desaparecieron grandes grupos de animales como
los trilobites, graptolites y peces acorazados. Los
invertebrados característicos de este período fueron los
Amonites, de caparazón con forma de caracol, y los
belemnites, más pequeños y con el caparazón alargado y
puntiagudo, entre otros equinodermos, braquiópodos y
cefalópodos. Se desarrollaron ampliamente los
vertebrados, sobre todo los reptiles, por lo que a la Era
Secundaria se le llama también la Era de los reptiles o
Era de los dinosaurios.
Braquiópodos:
Terebrátula
Rynchonella
Esponja marina:
Belemnites:
Ammonites:
En esta era aparecen también los mamíferos, las aves, y las
angiospermas o plantas con flores.
El mesozoico se divide en tres periodos:
Triásico.
Jurásico.
Cretácico.
YACIMIENTOS
ÍBEROS:
En el Hoyo del Agua existen restos de
asentamientos, en la ladera de la montaña donde está "la
casilla del cura", se pueden observar restos de piedras que
formaban los muros de una antigua población. En la parte
baja, por donde transcurren las aguas en tierra de cultivo,
localicé varias piezas de vasijas, platos y urnas con
decoración típica íbera (espirales ocres y dibujos
sinusoidales).
Cerca del
"Puente del Yesar", se encontró una tumba romana con
inscripción en latín. Además hay diseminados montones de
fragmentos de cerámica por toda la zona. Encontré restos de
vasos de vidrio de la época romana, así como de vasijas y
elementos que pueden indicar que bajo el suelo agrícola
puede encontrarse una pequeña ciudad.
Fragmentos de cerámica negra recogidos cerca del lugar donde
se encontró la tumba romana:
Fragmento de vidrio de la época romana (apréciese el tono
violáceo característico):
Otros restos recogidos en la misma zona:
Cuando indico
"restos musulmanes", no digo "restos árabes", ya que,
como es bien sabido, realmente se trataba de
construcciones realizadas por población musulmana autóctona
y no necesariamente ligada a árabes o beréberes. Así pues,
hablamos de arte islámico o musulmán, ligado a una cultura-religión y
no a una etnia. La influencia islámica debió ser muy
importante y lo más probable es que en el subsuelo se
encuentren multitud de restos.
A pesar de la
gran presión que la Inquisición debió tener y la
expulsión de los moriscos, está demostrado, que muchísimas
familias moriscas se quedaron en toda la Península, muchos
niños moriscos fueron raptados y vendidos a familias
cristianas que no podían tener hijos y como bien se sabe,
muchos de los moriscos volvieron escondidos. En la zona
manchega la población morisca fue muy importante y dejó
huellas imborrables en nuestras costumbres (cultivo del
azafrán, marroquinería, etc.), gastronomía, vocabulario,
apellidos y
como no, en nuestra sangre.
Al respecto de
los restos arqueológicos,
tenemos una atalaya muy deteriorada, "El Torreón" que muy
probablemente sea de estilo almohade, dada su similitud con
esta otra de Jorquera:
En nuestro
"Torreón" se aprecia un corte en la parte superior, que
coincide exactamente con la altura de la iglesia del pueblo,
si lo miramos desde las afueras. Esto nos indica, que
probablemente en la Edad Media, fue destruido a propósito y
rebajado a un nivel no superior al de la torre de la
iglesia.
Las ruinas de
esta Torre Vigía se erigen en la parte más elevada de
este pueblo serrano. Atalaya de planta rectangular
construida en sillarejo con refuerzo de sillares en las
cuatro esquinas.
Edificio más
antiguo que está conservado en su totalidad, si bien
presenta carencias estructurales importantes. Entre la pared
del corral de Perdigón y la Iglesia se encontró una
importantísima huesaria con decenas de esqueletos de todas
las edades que fueron sacados en un remolque y depositados
en el cementerio viejo, de un modo irresponsable ya que se
dejaron a la intemperie y fueron pasto de las pandillas
juveniles quienes destrozaron casi todos los restos.
Desconozco el origen de estos cadáveres ni cuál pudo ser la
causa de que fueran encontrados en esta fosa común que
estaba en el corral de mi padre. Posteriormente, mis padres
decidieron ceder ese terreno y alejar las paredes de su
corral varios metros.
La iglesia es de mampostería con
sillares en las esquinas. De una sola nave en forma de
salón; el ábside cubierto con cúpula de media naranja sobre
arcos torales. Dos capillas laterales también con cúpula de
media naranja. Torre a los pies, con dos ojos en su frente y
uno lateral; portada sencilla con una columna exenta.
En la ventana
de la iglesia, que hay al lado de su puerta, encontramos
unas inscripciones en latín y el año de su construcción
1743:
Aquí pone: "JOSEPHO AGASTELLO RECTORE
HACETILLA INFILI JETDEI PARAHONOREM"
La primera frase es ilegible, pero después
pone: "----?ET INVICTA JVDITH PVLCHRA ABISAIVIRG VTRVM
FOVENS DAVID".
Unos vándalos han destruído parte de esta
inscripción y no es posible leerla entera: "SALVE ARCATE
--------? TRONVS SALOMON----? RVTASVI---?
Con gran dificultad aquí se puede leer
(aunque algunas letras no se distinguen bien): "RACII EL
CVRATOREM AGIPTI FONTAVITI SALVATOREM MVNDI MARIA GESTAVIT"
Y en el lado derecho de la puerta, en la
pared, grabado en la piedra podemos vislumbrar un arcaico
reloj de Sol, muy interesante, pues se puede apreciar el
orificio en el que se debió insertar la varilla y las rayas
que indicarían las horas en la periferia: